«La isla está generando un cambio en torno al mundo del arte. Viene muchísima gente, muchos coleccionistas o responsables de fundaciones. El MACE también tiene una programación muy interesante. La isla necesita mucho más, pero poco a poco va ganando», reflexiona Guillermo Romero, responsable de la división ibicenca de la galería madrileña Parra & Romero, ubicada en Santa Gertrudis, que este año cumple su quinta temporada en la isla.

«La valoración de estas temporadas no puede ser más que positiva. La galería está creciendo aquí y nuestros artistas lo hacen al mismo tiempo. Cada vez tiene más sentido el proyecto», apunta el galerista mientras recorre la sala, un espacio de 1.000 metros cuadrados ubicado detrás de la ITV de Santa Gertrudis.

La galería ofrece esta temporada una exposición que permite acercarse a dos artistas excepcionales, con discursos muy sólidos y obra de proyección internacional: Nancy Holt y Walid Raad. Dos generaciones de creadores que se enriquecen mutuamente.

La muestra de Nancy Holt (EEUU 1938-2014) es especialmente interesante ya que es la primera vez que se puede ver obra de esta artista en España. No solo eso sino que, a raíz de la muestra ibicenca, el CAPC de Burdeos y un museo español que no se puede revelar por el momento van a montar sendas exposiciones de la artista.

«La obra que hemos traído a Ibiza está conectada con una de las piezas más importantes de Holt, que data de 1973: 'Sun Tunnels', una pieza de land art [una corriente del arte contemporáneo que enlaza paisaje y obra] ubicada en el desierto de Utah», explica Romero, que incluso apunta que siguen pensando en donar a la isla una pieza similar y ubicarla en un espacio que sea de acceso público. «Tenemos que encontrar el lugar y la financiación para hacerlo», apunta.

'Sun Tunnels' es un referente mundial. Para hacerla, Holt estuvo estudiando durante tres años el movimiento del sol y de las constelaciones, de modo que cada 21 de diciembre, al amanecer y al atardecer, la luz del sol se alinea perfectamente y atraviesa estos túneles, ofreciendo una experiencia casi mística al público.

En Ibiza se pueden ver las obras que creó en la misma etapa pero pensadas para interiores: una serie de fotos tomadas en 'Sun Tunnels', además de la instalación 'Holes of light' y 'Locators'. Se pueden ver también bocetos e información complementaria de la artista en unas mesas con vitrina.

«Holt es una figura fundamental para entender el land art de artistas como Michael Heizer, Walter de María o Carl Andre», subraya Romero, que apunta además un hecho relevante: Holt fue pareja de Robert Smithson y su obra quedó en segundo plano frente a la de su esposo, que fue un pionero.

La sala expone también una pieza muy interesante de Walid Raad (Líbano, 1967), 'Yet More Letters to the Reader', que supone una continuación de la línea de exposiciones que inició en el MoMA en 2015 y que luego viajó al ICE de Boston y al Museo Jumex en México.

«Originalmente se mostró en la bienal de São Paulo y en el museo Serralves en Portugal», explica el galerista, que abunda en las bases creativas de este artista libanés: «Hasta 2004 Raad trabajó en un colectivo ficticio que se llamaba The Atlas Group, que estaba muy interesado en el desarrollo del proceso de crear archivos. Así que crean archivos con información real pero que no existen en la vida real para explicar de una manera más detallada el conflicto en la guerra civil de Líbano. A partir de esa etapa, que fue muy importante en la historia del arte árabe, Raad empezó a trabajar con su propio nombre y desarrolló una serie de obras bajo el nombre 'Scratching on things I could disavow', que emplazan a reflexionar sobre las diferencias entre lo que es el mundo del arte en Occidente y el mundo del arte en Medio Oriente», añade el galerista madrileño.

«La obra que se puede ver en Ibiza está compuesta por paneles verticales que representan las paredes y las baldosas del suelo de los principales museos europeos y norteamericanos como la Tate, el Metropolitan, el Reina Sofía, el Pompidou o el Louvre», relata el galerista. «Sin embargo, en las paredes no vemos cuadros sino unas sombras que hacen referencia a obras de artistas árabes que no están en esos museos. Otra peculiaridad es que las sombras no se crean en la superficie sino en el interior. La sombra como metáfora de la atemporalidad y el desplazamiento», reflexiona Romero.

Aunque han vendido casi todos los paneles por separado, la pieza completa se podrá volver a ver en una exposición retrospectiva que se está preparando para el año 2019 en el Stedelijk Museum de Amsterdam con Beatrix Ruf, la antigua directora del Kunsthalle Zürich, como comisaria.

El horario de apertura de la sala es de lunes a sábado de 18 a 22 horas. Abierta hasta octubre.