En estos años de actividad, por Parra & Romero han pasado coleccionistas muy conocidos, fundaciones privadas y han notado un incremento de estadounidenses entre el público. «Gente a la que le gusta mucho el lado cultural de la isla», apunta el galerista. «Las instituciones no siempre entienden ese impacto, aunque ese problema no es exclusivo de Ibiza. La gente a veces no es consciente del impacto que la cultura puede tener», reflexiona Guillermo Romero. «La política ha tenido una falta de visión sobre esto: piensan que la cultura de un determinado nivel es para una élite, pero la realidad es que si ellos tuviesen una visión más amplia se darían cuenta del enorme impacto que puede tener la cultura sobre la isla».
