Sin llegar al nivel de mortalidad de series como 'Juego de tronos' o 'The Walking Dead', lo cierto es que en sus cinco temporadas 'Peaky Blinders' ha dejado un buen rosario de cadáveres. Algunos bastante ilustres... otros no tanto. Pero hay cuatro personajes que Steven Knight, el creador de la serie, se arrepiente de haber finiquitado.

Cuatro rostros que aparecen en las pesadillas creativas del 'showrunner' de la serie británica protagonizada por el inconmensurable Cillian Murphy, y que reveló durante un visionado online de la ficción organizado por la revista 'Esquire'. Se trata de Aberama Gold (Aidan Gillen), Barney Thompson (Cosmo Jarvis), Malacki Byrne (Tom Vaughan-Lawlor) y el Major Campbell (Sam Neill).

Sobre el personaje interpretado por Gillen, el vengativo y peligroso gitano que pereció a manos de los terribles Billy Boys en el capítulo final de la quinta temporada, Knight dijo que "debería haber mantenido a Aberama vivo, podría haberlo herido solamente".

En cuanto a Barney Thompson, el compañero de Thomas Shelby en la Segunda Guerra Mundial al que saca del psiquátrico para ejecutar su plan al final de la quinta temporada, lamentó haber eliminado al personaje encarnado por Cosmo Jarvis porque el intérprete "estaba brillante". "Realmente desearía haberlo mantenido vivo porque era un actor realmente bueno", reconoció.

"El otro es Tom Vaughan-Lawlor, que interpreta a Malacki Byrne. Es un papel pequeño pero lo que hizo con él fue brillante", dijo Knight que se justificó apuntando que a veces hay que tomar este tipo de decisiones "para que la historia avance".

El actor que no quería morir

También se arrepiente de haber acabado con el Major Chester Campbell, el personaje interpretado por Sam Neill y con el que acabó Polly Gray al final de la segunda temporada. "Creo que tuvimos que darle un final al enfrentamiento entre Tommy y Campbell", recuerda el guionista que recuerda que cuando se lo dijo al actor, éste no aceptó de muy buen grado la muerte de su personaje.

"Le llamé y se lo expliqué y me dijo: 'No quiero morir'. Entonces le contesté: 'Ok, le daré una vuelta'", admite Knight que confiesa que después de repensarlo... decidió matener su decisión. "Sam lo aceptó de forma genial", concluye.