El 25 de septiembre de 2015, la televisión pública de Noruega lanzó el primer episodio de ‘Skam’, serie que tuvo un gran impacto entre los jóvenes del país y que se convirtió en un fenómeno viral.

Sin promoción y con una emisión revolucionaria, la ficción batió récords de audiencia y arrasó en los premios de la televisión noruega. Tres años más tarde, Movistar+ busca repetir el éxito pero adaptándolo a las particularidades de la juventud española. La cadena ya ha anunciado un fichaje estrella para su ficción, Aitana, de ‘Operación Triunfo 2017’ .

Esta serie coral, protagonizada por un nuevo personaje cada temporada y a quien el espectador acompaña en todas las secuencias, sigue los pasos de varios estudiantes de la escuela Hartvig Nissen, en un acomodado barrio de Oslo.

Una peculiaridad de la serie es que apenas hay personajes adultos ya que la gran mayoría del elenco son adolescentes a los que se les trata desde el respeto, sin frivolizar, para que los espectadores de su edad se vean reflejados. En el formato español tampoco va a haber adultos que "vengan a explicarles cómo deben actuar", según afirma Fran Araújo, productor ejecutivo de Skam España. "Son los otros jóvenes los que dan la clave al personaje que está pasando por una mala situación para que encuentre su camino de una manera sana", señala.

La filosofía de la serie es generar contenido útil para los jóvenes. "La adolescencia es un lugar maravilloso en el que aparece todo por primera vez", recuerda el psicólogo Jesús López Menéndez, quien ha colaborado en la producción española para hacer de ella un reflejo fiel de la juventud de hoy en día. "La adolescencia genera sufrimiento porque los jóvenes no cuentan con herramientas para gestionar lo que sienten", afirma.

Los trastornos alimenticios, el amor y el sexo por primera vez, el acoso escolar, las rupturas y traiciones, la búsqueda de sí mismos o la necesidad de encajar son algunos de los temas que sigue las líneas maestras de Skam. La versión española rescata también el actual tema de la islamofobia.

‘Skam’ sigue el día a día, en tiempo real, de un grupo de jóvenes que han crecido en la era digital, por lo que la ficción incluye en sus tramas las nuevas tecnologías. Al finalizar cada capítulo, la vida de los personajes continua, ya que hay perfiles de los protagonistas en redes sociales, que los espectadores pueden seguir. En la web, los episodios se complementan con conversaciones de Whatsapp o imágenes de Instagram.