Con su sonrisa te seduce, mientras con la otra mano te corta el cuello. La encargada de dar caza a esta implacable sicaria compatibiliza su trabajo en el MI-5 británico con su vida familiar y raras veces ha salido de la oficina.

Éstas son las dos protagonistas de 'Killing Eve', un thriller de espías con vocación feminista y muy alejado de los tópicos del cine de James Bond. En la historia, las tramas de espionaje se alternan con los golpes de humor negro.

La ex 'Anatomía de Grey' Sandra Oh es Eve Polastri y la menos conocida Jodie Corner es la letal asesina Villanelle Ambas protagonizan este innovador thriller de la BBC americana. Completan el reparto, la veterana Fiona Saw y Kim Bodnia, a quienes recordarán los seguidores del thriller nórdico 'Bron-El Puente' por su papel de Martin Villanelle contra Eve. Una letal agente rusa y sin remordimientos, interpretada por Corner, contra una funcionaria delos servicios secretos británicos lejos de los escenarios de acción, encarnada por Oh.

El personaje de Eve Polastri disfruta tratando de imaginar cómo piensa un asesino y es la primera en deducir que el crimen que tienen delante es obra de una mujer cuando el expediente llega al MI-5. El muerto es un proxeneta apuñalado en plena calle. Polastri deduce que sólo una mujer podría haberse acercado tanto él con un cuchillo, porque éste jamás la habría percibido como una amenaza.

De esta manera, empieza a meterse en la mente de la asesina, pero, debido a su inexperiencia, la investigada conoce la identidad de su perseguidora, la única persona que se ha dado cuenta de que ella existe, y también se dedica a intentar comprender cómo piensa su rival. La una se obsesiona con la otra y viceversa, comenzando así un trepidante juego del gato contra el ratón, cuyo tablero es el continente europeo por el que ambas se persiguen.

Éste es el punto de partida de 'Killing Eve', una de las sorpresas del año seriéfilo cuya primera temporada ya está al completo disponible en España en HBO. La segunda temporada dela serie ya está aprobada y no sería de extrañar que viéramos nuevas entregas en un futuro, dado que ya hay cuatro novelas de esta saga de la pluma de Luke Jennins. Phoebe Waller Bridge, la responsable de llevar a la pequeña pantalla la historia de 'Killing Eve', ya tuvo un momento dorado en 2016 con el éxito de 'Fleabag', un dramedia que protagonizaba, escribía y producía ella misma y que se convirtió en una de las mejores series de ese año.

En 2018, su carrera parece cimentarse, no sólo por el éxito de 'Killing Eve', sino porque también estrenará en septiembre en Amazon la segunda temporada de su anterior éxito. En los cines, también este año ha puesto la voz a ese droide femenino revolucionario (L3-37) que se apuntaba a la causa de la liberación de los robots en la película de 'Han Solo' y que tenía algunos delos mejores momentos del innecesario spin off de la saga galáctica.

Hacer un repaso a otros trabajos anteriores de esta creadora televisiva no es casual, ya que su estilo y sus obsesiones como creadora se dejan ver en esta serie. ¿Estamos ante la Lena Dunham británica? Hasta hay similitudes entre el personaje que ella misma interpreta en 'Fleabag' y la personalidad de la letal Villanelle. Alguno se preguntará, ¿qué puede tener en común una serie tipo 'Girls' con un thiller de espías? Fleabag no es una asesina, pero disfruta haciendo daño a todos los que se acercan a su alrededor: A sus exnovios, a su madrastra, e incluso a otros miembros de su familia. A medida que pasan los capítulos, vemos que ese dolor que causa nace del no poderse perdonar un hecho de su pasado reciente.

El personaje de Villanelle no es muy distinto, aunque a otra escala. En 'Killing Eve' nos alejamos delos problemas familiares para meternos de lleno en las intrigas de espías. A Villanelle lo que le gusta es matar. No tiene remordimiento de ningún tipo, disfruta con ello y es capaz de hacer macabras bromas a sus víctimas antes de ejecutarlas. Además tiene una firma muy característica para ellas, que casi siempre son masculinas: les corta el pene. Esa insensibilidad ante el sufrimiento ajeno nace también de un hecho traumático de su pasado, que los servicios secretos rusos han sabido aprovechar para crear una perfecta máquina de matar.

Fleabag y Villanelle son en el fondo personas que bajo su narcisismo, cierto carácter infantil y su amolaridad ocultan personalidades atormentadas y muy alejadas del rol femenino clásico. Como también el androide interpretado por Waller Bridge no era el típico robot de las películas de la saga 'Star Wars'. Nada en 'Killing Eve'se acerca a otros productos similares del género. A pesar de estar rodada en distintos escenarios de capitales europeas, no se nos muestran los típicos lugares de postal sino otras zonas menos conocidas.

También la notable banda sonora se aleja de lugares comunes y anima algunos de los momentos más duros a ritmo de música pop. Al sentarse a ver 'Killing Eve', espera lo inesperado