El establecimiento hotelero de la familia Guasch marca un cuidado estilo desde sus dos entradas en pleno campo, el paso por sus jardines y la estructura del conjunto en la que destaca una arquitectura rural magníficamente restaurada con cierto toque sofisticado en su interior que conjuga el arte moderno con el tradicional blanco de la construcción típica ibicenca.

En sus paredes cuelgan las obras del artista jerezano afincado en Eivissa, Willie Márquez, cuya obra caligráfica sobre blanco entronca a la perfección con el interiorismo sobrio y moderno de sus estancias. Safragell ofrece, además de confort, belleza, relax y la paz del norte de la isla, una trilogía de arte, música y gastronomía en su restaurante de autor denominado igualmente 'Safragell'.

El viernes 21 ofrece un menú especial de degustación con tapas de creación del chef y música de Doralice y Alfredo Souza.