La calle Sant Vicent acogió ayer durante toda la mañana una peculiar matanza tradicional, en la que profesionales de la Associació de Restaurants de Santa Eulària descuartizaron al cerdo (al que se sacrificó en el matadero por motivos de «salubridad») y prepararon a la vista de los sorprendidos viandantes la carne con especias en grandes barreños para después rellenar las tripas con las que hicieron sobrasada y butifarrón. Esta iniciativa abre la tercera edición de las Jornades Gastronómiques del Porc, los conocidos como ´Menús de matanzas´, una campaña de promoción de los productos locales y platos típicos de la gastronomía ibicenca en la que participa una decena de establecimientos del pueblo.