Crisis de gobierno en Formentera y pleno

La Junta de Gobierno, sin Córdoba, aprueba hoy la adjudicación de los quioscos de playa

El pleno insta a al presidente del Consell a que firme y publique el acta del 25 de marzo de la junta, en la que perdió los nervios

Un momento del pleno ordinario del Consell del mes de abril

Un momento del pleno ordinario del Consell del mes de abril / C.C.

Carmelo Convalia

Carmelo Convalia

El pleno del Consell de Formentera celebrado esta mañana ha comenzado dando cuenta de que el presidente, Llorenç Córdoba, se aparta de cualquier decisión que tenga que ver con el concurso para la adjudicación de los ocho quioscos de playa, como consecuencia del escrito de recusación presentado por casi todas las empresas que optan a una de las concesiones. La recusación afecta también a la letrada de Recursos Humanos que suscribió el informe en el que se basa el presidente para declarar el concurso desierto.

El secretario de la Corporación ha informado de que «el presidente, aunque rechaza la recusación formulada, se aparta de la tramitación de este expediente». El escrito de Córdoba sobre su decisión indica que «no se opone a que en este expediente de los quioscos le sustituya la vicepresidenta primera» para «no suspender la tramitación con los perjuicios que comportaría para Formentera».

El conseller de Sa Unió, Óscar Portas, ha lamentado las palabras del presidente «porque es como un sí, pero no, debe ser el único en entenderlo, lo que está claro es que le han recusado». Ha avanzado que la previsión es convocar mañana una Junta de Gobierno urgente y extraordinaria, después de la ordinaria de todos los viernes, y aprobar la propuesta de la mesa de contratación para desencallar el tema de los quioscos».

En el turno de palabra el portavoz del PSOE, Rafa Ramírez, se ha preguntado: «¿Si no acepta la recusación por qué se aparta? Es como un no pero sí. Entonces, asume que lo que pone en el escrito de recusación de alguna u otra forma tiene razón... Es complicado de entender», ha reconocido.

Alejandra Ferrer, de GxF, ha dejado constancia de que «nos parece extraña esta situación de que se ha de resolver la recusación para saber si se le debe recusar». Ha añadido que «no se puede ser presidente a tiempo parcial y cuando uno es presidente, debe formar parte de todas las decisiones, esté o no de acuerdo con el resultado».

El presidente, en referencia a la recusación, ha dicho: «Lo que hago es no aceptarlo, es un escrito ridículo. Una cosa es que no acepte la recusación y otra es que voluntariamente me aparte» del concurso.

El acta del día 25 de marzo

El pleno ha retomado la cuestión de los quioscos al final, a raíz de una propuesta de urgencia de los socialistas, que ha sido aprobada por unanimidad y que pide «una inmediata aprobación y publicación» del acta del 25 de marzo. En esa junta, como publicó Diario de Ibiza el 20 de abril, el secretario y el interventor desmontaban la propuesta de Córdoba de declarar desierto el concurso y se recogía la tensión que se vivió entre el presidente y estos funcionarios ante su insistencia.

El socialista Rafa Ramírez ha insistido en que la tardanza en firmar y hacer pública esa acta «es un secuestro de un documento público», y se ha interesado por la fecha exacta en la que estaba listo el borrador. «También queremos saber por qué no se ha publicado, porque el tema no es la filtración, sino lo que pone en el acta, porque según lo publicado lo que sucedió es grave».

En ese momento ha asumido la presidencia del pleno la vicepresidenta primera, Verónica Castelló, y de nuevo ha surgido la tensión con el presidente, que debía contestar a la propuesta: «Le paso la presidencia a la vicepresidenta para que haga lo que quiera, como hace siempre». Entonces Castelló le ha contestado: «Perdón, yo no hago lo que quiero sino que me atengo a los artículos (...) del ROC».

El presidente ha entendido entonces que tenía que hablar primero el equipo de gobierno, a lo que Castelló le ha replicado que las juntas y las actas las convoca y firma el presidente y que era él en contestar, cuestión que fue ratificada por el secretario.

Córdoba ha replicado: «Que el acta del 25 de marzo fue filtrada a un medio... Creo que las explicaciones las tendría que pedir a quién lo haya filtrado». «Es un borrador de un acta y es muy serio que se haya filtrado», ha insistido.

«Soy el culpable de no haberla acabado», ha añadido en referencia al acta. Y se ha justificado diciendo que ni siquiera ha podido aprobar el acta anterior del último pleno: «¿Alguno piensa que yo puedo presionar al señor secretario para que ponga lo que yo quiero que ponga? Me parecería una falta de respeto muy grave». Fue entonces cuando ha admitido que «si está retrasada [la aprobación del acta] es por culpa mía, pero no por mala fe, como otras cosas, y los señores de Sa Unió también son culpables». «Soy culpable de que no esté, sí, está por firmar y se publicará lo antes posible», ha reiterado.

Alejandra Ferrer ha manifestado: «Cuando pensaba que [el funcionamiento del pleno] no iba a ir a peor, va. Y el secretario ha dicho cómo se tenían que hacer las intervenciones». «Las actas se han de publicar y antes las debe firmar [el secretario] y si nos dicen que esta acta ya está acabada, se debe publicar (...) es sencillamente subirla a la web».

Ha admitido que es un tema importante, «y si no está judicializado lo estará en breve». «Está claro que esta acta se tiene que hacer pública cuanto antes», insistió.

Alcaraz a Córdoba en el pleno: «No nos tome por tontos, ¿qué está escondiendo?

El consellers de Sa Unió y presidente del PP, José Manuel Alcaraz, ha intervenido para declarar que «el señor presidente es el capitán de un barco como el Titanic, pero no por ir contra un iceberg, no; este presidente va contra todos los icebergs». Le ha recordado que en la junta ordinaria de mañana se lleva un acta del 22 de abril: «Estamos aquí porque la oposición pide que se apruebe un acta que usted tiene desde el 27 de marzo para firmar, hace casi un mes. No nos tome por tontos, ¿qué está escondiendo?».