Cada vez son más las actrices que denuncian haber sido obligadas a perder peso para poder conseguir un papel en una película. La industria de Hollywood siempre ha sido muy exigente en lo que al cuerpo femenino se refiere y a día de hoy aún se continúa luchando contra los imposibles cánones de belleza que algunos directores exigen.

Anne Hathaway es la última actriz que ha roto su silencio y ha hablado de como cuando estaba empezando en el mundo de la actuación la incitaron a perder peso: "A los 16 años fue como 'felicidades, has conseguido el papel. No estoy diciendo que necesites perder peso. Solo digo que tampoco lo ganes'", explica la actriz a la revista Allure, de la que es portada en el número de septiembre. "Eso, por supuesto, significa que tienes que perder peso", continúa diciendo.

Fueron los productores de la serie Get real los que le insinuaron esto a Hathaway. "Soy cautelosa a la hora de elogiar cómo Hollywood está cambiando. Hay mucha inclusión corporal, ¡lo cual es genial! pero lo delgado definitivamente sigue siendo la expectativa centralizada como 'normal'", comenta la actriz.

Anne lleva muy interiorizada la necesidad de perder peso, o ganarlo, para algunos papeles, siempre y cuando merezca la pena. Por eso mismo la vimos prácticamente en los huesos cuando participó en el musical Los Miserables y ella misma explicó que iba a aumentar nueve kilos para convertirse en la protagonista del filme Barbie, la adaptación de la historia de la famosa muñeca. Como vemos, siempre y cuando el papel lo requiera, ella estará de acuerdo en someterse a un cambio físico, pero nunca para entrar en los absurdos cánones de belleza de Hollywood.