Que la realidad supera a la ficción no es solo una fase hecha. Prueba de ello son algunas de las fugas de la cárcel que se han vivido en la vida real y que han sido mucho más impresionantes que las que hemos visto en la gran pantalla.

La de Redoine Faid, la última

Hace apenas unos días Redoine Faid, un conocido ladrón de joyas escapó de una forma espectacular de una cárcel de Francia. Un comando de tres personas armadas aterrizó con un helicóptero en el patio de la prisión para llevarse al detenido. El aparato fue encontrado después entre los aeropuertos parisinos de Le Bourget y de Charles de Gaulle. Sus ocupantes continuaron la fuga en coche.

Redoine Faid había sido condenado hace menos de tres meses a 25 años de cárcel como organizador de un atraco a un furgón blindado que provocó la muerte de una policía en 2010 en Val-de-Marne, en las afueras de la capital francesa y en 2013 ya se había escapado de la cárcel. En esa ocasión, utilizó explosivos y retuvo a varios funcionarios.

Un escape por amor

Faid se pudo inspirar en la fuga que Michel Vaujour ya protagonizó en Francia en 1986. El preso se había escapado antes 5 veces de la cárcel. Pero la última, pasó a la historia. Lo hizo también en un helicóptero, pero en esta ocasión pilotado por su mujer, quien dio clases específicas para llevar a cabo su plan, para luego colarse encima del patio de la prisión de La Santé y lanzarle una cuerda a su marido, quien trepó hasta el aparato para reencontrarse con ella y dar la vuelta a medio mundo antes de ser capturado de nuevo.

La huida del Chapo Guzmán

Una de las fugas más sonadas fue la del narcotraficante Joaquín 'El Chapo' Guzmán, jefe del cartel de Sinaloa, de la cárcel del Atiplano I, en el Estado de México en 2015. El preso entró a la zona del presidio en la que habitualmente se bañan los reos y lavan sus enseres. Al ver que el tiempo pasaba y que el delincuente no salía, los guardas entraron y descubrieron "un hueco de 50 por 50 centímetros y 1,5 metros de profundidad". El agujero, por el que ´El Chapo´ se escapó desembocaba en un túnel que contaba con tubería de pvc para ventilación y alumbrado y acababa en un inmueble que se encuentra en obras al suroeste de la prisión, una de las consideradas más seguras de Latinoamérica. Estuvo fugitivo hasta enero de 2016 y, tras su captura, fue extraditado a Estados Unidos.

La fuga de Alcatraz

Es la más famosas y ha sido llevada a Hollywood en varias ocasiones. Alcatraz era la cárcel más segura de Estados Unidos, al estar en una isla frente a la bahía de San Francisco, hasta que Frank Morris, Clarence y John Anglin lo pusieron en duda.

Los tres reos cavaron durante meses un agujero con cucharas y cuchillos que robaron de la cocina y por el que salieron de la cárcel en 1962. Lo que nunca se ha sabido es si llegaron a sobrevivir, aunque en 2018 el FBI publicó una carta en la que se leía: "Mi nombre es John Anglin. Escapé de Alcatraz en junio de 1962 con mi hermano Clarence y Frank Morris. Tengo 83 años y me encuentro en mal estado. Tengo cáncer. ¡Sí, nosotros lo conseguimos aquella noche!". Si la misiva era real es todo un misterio.

El preso yogui

Pero quien sin duda ha protagonizado una fuga de película es Choi Gap-Bok, un coreano que antes de ser enviado a la cárcel por un robo en 2012 daba clases de yoga, las cuáles le valieron para escapar introducirse por la rendija por la que le entregaban la bandeja de la comida en su celda y que tan solo contaba con 15 centímetros alto por 45 de largo. Para no levantar sospechas dejó un muñeco dentro de su cama. Una historia que de haberse llevado al cine hubiésemos pensado que era una fantasmada.