Roman Polanski amenaza con demandar a La Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas de Estados Unidos tras ser expulsado de la organización la pasada semana. El director, que fue condenado por mantener relaciones sexuales con una menor en 1977, fue apartado de la institución como respuesta a las acusaciones de conducta sexual impropia que han salpicado Hollywood.

En una carta dirigida a la Academia, el abogado de Polanski, Harland Braun, advirtió que el realizador tenía derecho a "acudir a los tribunales y exigir que la organización siga sus propios procedimientos, así como las leyes de California". "La única solución adecuada sería que su organización rescindiera la expulsión ilegal y siguiera sus propias normas de conducta, indicando a Roman Polanski los cargos en su contra y una audiencia justa para que exponga su posición ante cualquier propuesta de expulsión", añadía la misiva.

El director fue expulsado la semana pasada junto con el actor Bill Cosby, condenado por drogar y agredir sexualmente a una mujer hace 14 años.

En una entrevista al diario polaco Newsweek Polska concedida por Polanski antes de la expulsión, el ganador del Oscar calificó el movimiento #MeToo de "histeria en masa". "Todo el mundo está apoyando este movimiento por miedo... Creo que es una hipocresía total", afirmó.

Polanski admitió en 1997 que tuvo sexo con una niña de 13 años en Los Ángeles. La víctima, Samantha Geimer, quien en la actualidad tiene 55 años, aseguró en una entrevista a Vanity Fair que no quería que el director fuera expulsado de la Academia. "Es un acto feo y cruel que solo sirve para aparentar", apuntó Geimer y añadió que "no contribuye nada a cambiar la cultura sexista de Hollywood".