Han pasado algo más de tres meses desde que Marta Torné y su, ahora marido, Roger Gual, contrajeran matrimonio en una ceremonia alejada de todo convencionalismo. La actriz y el director y guionista no han tenido aún tiempo de disfrutar de una luna de miel, y es que el trabajo les tiene sin parar y separados, ya que ella trabaja en Madrid y su hogar matrimonial se encuentra en Barcelona.

La catalana no tiene prisas por tener hijos, ser madre no es uno de sus sueños, pues asegura que no posee mucho instinto maternal. Además cuenta con su perro, Rufus, al que adora como si de un hijo se tratase y al que ha abierto una cuenta en Instagram como parte de un proyecto literario en el que está trabajando.

Se ha convertido en una radiante mujer casada pero en lo profesional tampoco tiene queja, ni televisión, ni publicidad ni teatro se le resisten. Imagen de la marca Evax, continúa formando parte de Cámbiame y sigue de gira teatral con El ministro en compañía de Carlos Sobera, Javier Antón y Guillermo Ortega.

PREGUNTA (P): ¿Eres de las que se atreven con cualquier cosa que le propongan?

MARTA TORNÉ (MT): Soy más de suelo o agua, acrobacias y todo esto me cuesta un poco más, sobre todo lo de ponerme bocabajo.

P: ¿Qué cosas son las que te hacen sentir bien?

MT: No tiene nada que ver con las compresas que conocíamos hasta ahora, cuando la probé lo noté. El material no tiene nada que ver, es lo más cercano a un tampón porque no notas nada.

P: ¿Qué cosas te hacen sentir libre en tu día a día?

MT: Poder decir lo que pienso, poder hacer lo que me apetece en casi todo momento e intentar hacer todo lo que me hace feliz.

P: ¿Qué más proyectos tienes para este nuevo curso que comienza?

MT: De momento estamos con Cámbiame y en el teatro con Carlos Sobera. Estamos aún de gira, una gira interminable gracias a Dios y aun tenemos para largo, estoy muy contenta. Es complicado compaginarlo porque el teatro es fin de semana y hay que viajar mucho, pero lo hacemos contentos.

P: ¿Qué balance haces de esta etapa de Cámbiame?

MT: Estoy muy feliz. Hay una estadística que dice que hay un veinte por ciento de proyectos que funcionan, yo ya llevo un tiempo en esta profesión y son más veces las que no salen bien que la salen bien, por eso tener un programa que funciona tan bien como Cámbiame lo disfrutas muchísimo. Además los tres estilistas somos como de la familia y ha sido muy guay que tengamos tan buen rollo. Me gusta mucho hacer el programa, estoy muy contenta.

P: ¿Qué crees que ha fallado en Cámbiame Premium?

MT: Ojalá lo supiera porque en ese caso me iría a trabajar de directiva de Telecinco. No lo sé, creo que a la gente le importa más que los personajes sean anónimos y tengan una historia detrás, lo prefieren antes que ver a un famoso con un cambio de pelo de largo a corto. Era un programa totalmente diferente, un programa muy difícil, muy ambicioso, muy bien resuelto y muy bien hecho, maravillosamente presentado por Jorge Javier Vázquez, pero la televisión es así, yo lo hubiera aguantado un poco más pero las cadenas funcionan así.

P: Se ha hablado mucho de que se trata del primer fracaso televisivo de Jorge Javier, ¿qué te parece?

MT: Me hace mucha gracia porque ha sido un tropiezo, tampoco es culpa de él. Jorge es fantástico como profesional y como presentador, a la gente le encanta y tiene muchísimas facetas. Parece que están esperando que la gente fracase un poco para tirarse al cuello. Este país es así, como dicen: sufro más por tus éxitos que por mis fracasos.

P: Profesionalmente estás en un momento estupendo, ¿personalmente, que balance haces de este primer verano como casada?

MT: Estoy normal, igual que antes porque salgo de trabajar y mi sede amorosa está en Barcelona, donde está mi hogar matrimonial. Estoy todo el día trabajando, todavía no he tenido luna de miel y ni si quiera he podido hacer las copias de las fotos de la boda.

P: ¿Crees en el mito de que el matrimonio cambia la pareja?

MT: No lo sé, todavía no me ha dado tiempo a averiguarlo, tampoco somos una relación de discutir. Estoy muy bien, la boda era una fiesta que queríamos hacer con nuestra familia y amigos para celebrar que estamos muy bien y nada más.

P: ¿Tienes ganas de encontrar el hueco para esa luna de miel?

MT: Muchas.

P: ¿Tenéis decidido qué vais a hacer?

MT: Me gustaría mucho ir a Japón porque allí puedo desconectar del todo. Ya estuve y me apetece volver porque me encanta ese país, pero cualquier destino en el que haya playa o sol también estaría bien, de momento no tengo fecha a la vista para poder escaparme una semana.

P: ¿No vas a tener vacaciones?

MT: No, llevo dos veranos sin vacaciones ya y se me está empezando a poner la piel verde (ríe). Pero no me quejo nada, el año anterior a estos dos veranos, antes del Hable con ellas hubo una temporada en la que no había tanto trabajo y ahora cuando viene mucho lo disfruto más.

P: Después de la boda siempre vienen los niños, ¿te has planteado ser madre?

MT: No me puedo plantear ahora eso, ¡ni siquiera tengo tiempo para poder hacerlo! No me lo planteo y tampoco soy una mujer con mucho instinto maternal a la que le gusten mucho los niños, no me importa decirlo, lo tengo ya bastante superado.

P: ¿Tu mascota sacia ese instinto maternal?

MT: Mi perrito es como mi hijo, lo quiero mucho y además está ahora con problemas respiratorios y no puedo estar con él porque está en Barcelona que es donde lo tratan. El día que falte no sé que voy a hacer.

P: Le has abierto una cuenta de Instagram...

MT: Sí, le he abierto una cuenta y además tiene ya más de seis mil seguidores, estoy muy contenta. Es un proyecto que tengo con mi perro, una cosa que va a salir próximamente, aún no puedo confirmar nada y es para calentar motores.

P: ¿Alguna pista?

MT: Es un proyecto literario en el que explico mis aventuras a nivel autobiográfico pero narradas por mi perro, es muy divertido.

P: ¿Tienes algún nuevo proyecto más?

MT: Tengo un proyecto muy guay que me confirman esta semana, pero ahora mismo si tuviera que pedir un deseo pediría continuar con “Cámbiame” y con teatro todo el año que viene y también descansar un poco. Da miedo decir que no a algún proyecto por si luego no te llaman más pero hay que buscar un poco el equilibrio y ya llevo mucho trabajo encima.

P: ¿Ese proyecto es televisión, cine o teatro?

MT: Es un proyecto de publicidad.