­La exposición que ofrece hoy a partir de las 19.30 horas la galería de Vila Via2 no podría ser más completa. Escultura, pintura y fotografía se unen en la sala de la mano de Maria Catalán y Joaquim Seguí. Los dos artistas compartieron exposición en el Espacio Micus –en la muestra ´Guerreros´ con otros tres creadores– y de ahí ha surgido la idea de reunirse de nuevo, esta vez en Via2.

La obra de Catalán abarca los tres últimos años de su trayectoria creativa y conjuga la escultura, con tres piezas en hierro, y la pintura. Esta última remite también a las tres dimensiones por sus texturas y capas –el óleo y el acrílico se mezclan con tizas y pasteles– y por que surgen, precisamente, de bocetos para sus obras escultóricas. Una parte de los cuadros pertenecen a una exposición reciente de la artista en el Palau de la Música de Valencia. Las esculturas, por su parte, atraen la curiosidad del espectador por los textos que las serpentean, prácticamente ilegibles, salvo para la autora. «Son cosas mías», confiesa Catalán entre risas.

La directora del MACE, Elena Ruiz Sastre, ha escrito que, en la obra de Catalán, «hay un poco de enfrentamiento de Maria con Maria. De surgir de ella para llegar a ser más ella. De no desaprovechar la ocasión para dar un paso más hacia la cima. Pues es caminar hacia lo alto y hacia lo bello de lo que se trata».

Por su parte, Seguí, cardiólogo del hospital Can Misses, presenta en Via2 una impactante colección de retratos realizados en dos viajes recientes a Etiopía y Namibia. Las fotografías se presentan en un soporte de papel baritado con tintas pigmentadas que le aporta fuerza y una definición más pictórica.

La mayoría de la fotografías son de tribus del sur del río Omo de Etiopía, principalmente de los Hamer, pero también hay retratos de los Afares, con sus característicos dientes afilados en forma triangular, que habitan una zona más árida del norte país. «Cada retrato tiene una historia detrás. Todas son imágenes consentidas por sus protagonistas, incluso en algunas posan de manera evidente», explica este enamorado de África, que muy probablemente volverá a invertir parte de sus vacaciones en fotografiar el continente.

Casi antes de explicar su obra, Seguí no quiere olvidar en sus agradecimientos a Maria Catalán, por proponerle la exposición en la sala Micus, además de a Mathiwos Gemechu, su amigo en Etiopía que le ha acompañado en sus incursiones por el país. También cita a Antonio Isasi-Isasmendi, Jorge Morales y Carles Fabregat, que han puesto palabras a sus imágenes en diversas ocasiones. Fabregat afirma de las fotografías de Seguí que «son todo un itinerario de instantáneas capturadas al vuelo, dispuestas a ilustrar aquella revelación de Paul Valéry, por medio de la cual sabemos que ´lo más profundo es la piel´».

Los beneficios de la exposición de Seguí se destinarán a proyectos de cooperación con Etiopía.