­Tras el éxito de público de ´Una legítima enverinada´, que se ha representado una decena de veces desde su estreno, el grupo de teatro de la Associació de Veïns des Molí presenta ´Els mijorals de Don Mariano´ que se podrá ver el próximo 17 de enero, día grande de Sant Antoni, a las 18.30 en la carpa del Passeig de ses Fonts.

«Es el tercer año consecutivo en el que estrenamos obra, animados por la gran aceptación que han tenido hasta ahora los montajes», asegura Vicent Serra, que es el autor y director. «Es 100 por cien costumbrista, con mucho humor, y siempre respetando la cultura ibicenca y empleando vocabulario casi en desuso», describe.

En esta ocasión se ha fijado en la figura de los mayorales, «muy arraigada en Ibiza desde 1900 hasta apenas treinta años y antes de 1900 también, claro» y la relación, a veces problemática, que tenían con los propietarios de los terrenos. «La obra está situada en los años 40 y 50, en la posguerra, cuando había mucha pobreza en la isla», explica el autor, que ha tomado esta circunstancia y le ha dado un toque que tira más al humor que al drama. «El humor y la gracia de la gente ibicenca», matiza.

La obra está dedicada a Mariano Llobet, un hombre por el que Vicent Serra sentía gran aprecio y admiración. «Mantuve una larga conversación en agosto del año pasado con él. Le dije que con su permiso le íbamos a dedicar la obra, que incluso un actor haría de él en la obra, y se mostró encantado de acudir conmigo al estreno para presentarla, ´si estoy vivo´, me dijo», explica Vicent Serra. «La historia transcurre en una hipotética finca de Mariano Llobet», añade el director de la obra.

En total serán diez actores sobre la escena. Los papeles principales los interpretan Pep Ribas Hereva, como mayoral, mientras que su esposa es Margarita Ribas, Joan Trías hace de comandante militar, Vicente Planells es Mariano Llobet y Elisa Verdura tiene también un papel relevante en la obra.

Serra espera que esta obra tenga una acogida tan buena como la anterior ´Una legítima enverinada´, que reunió «a 900 personas el día del estreno y se ha representado diez veces por toda la isla», confía el autor.