«Cada persona tiene que buscar su propia fe, ya sea en Dios o en uno mismo, y no tener miedo de la libertad, ya que todos estamos religados», considera Imma Vallès, la autora de ´Re-ligación: El sentimiento religioso en el mundo actual´, el libro que presentará esta tarde, a las 20.30 horas, en el Club Diario. Esta teóloga insiste en que el ser humano necesita «algo» que le vuelva a unir con el mundo porque en la actualidad está muy perdido.

Para comenzar, Vallés define el término que da título a su obra: «Re-ligación: viene de la palabra latina religare, que significa unir todo». Además, para explicarlo hizo referencia a Leonardo Bolf: «La nueva religión será la civilización de la re-ligación de todo con todo y de todos con todos». Según la autora, la religión es una ayuda para superar la situación por la que atraviesa el mundo actual, ya que, en su opinión, aporta soluciones en contenidos morales que la tecnología, la ciencia, la economía y la sociedad precisan para equilibrar el ser.

Para desarrollar su teoría, Vallès ha dividido su libro en cuatro partes. En la primera explica las características del mundo actual, donde destaca su distorsión de la realidad y egocentrismo y sus miedos. Para contrarrestarlas, aboga por un «instinto de vida y no de muerte».

Dios y las personas

En el segundo capítulo, el más extenso, desentraña el concepto de ´re-ligación´ y aborda la relación de Dios con la persona y la de la persona con Dios, así como el sentido religioso del pensamiento actual.

Además, critica a aquellos que declaran guerras en nombre de la religión. «En estas batallas no se trata de saber quién es más religioso que otro, sino de dinero, de la comercialización de la guerra. Es el gran negocio», se queja Vallès, que añade que aparte de los intereses por el petróleo, se esconden miles de millones.

Asimismo, denuncia que hay una serie de ciudadanos, «los de base», que son entrenados para entregar su vida, para inmolarse. Por esta razón, Vallès sostiene que más que una guerra de religiones es una guerra de «embaucadores».

La motivación y la búsqueda de aquello que permita recuperar el norte y unirse de nuevo a los otros ocupa el cuarto episodio de su libro. La autora aboga por encontrar una alternativa que no tiene por qué ser la fe en Dios. «Hay algo insustancial, como diría Arquímedes», reflexiona. En la misma línea, Vallès aboga por un «sentido religioso», que se traduce en una esperanza libre de manipulaciones y de intervenciones de determinados estamentos.

La teóloga, nacida en Barcelona pero afincada en Ibiza desde el año 1978, opina que la religión debería «enseñar valores, en vez de dominarnos». «Debería ser una enseñanza que permitiera saber qué es el dolor, la alegría, los celos y mostrarnos la diferencia entre la moral y la ética», afirma la teóloga. A modo de conclusión, apunta que el ser humano debe tener confianza en él porque la fragilidad «supone una pérdida de la identidad» y repite la necesidad de la «re-ligación» para superar las adversidades.