El director ibicenco David Marqués se tomó la escritura de ´Espacio´, la obra de teatro que se estrena los días 27 y 28 de diciembre en Can Ventosa y cuyas entradas están ya a la venta, en una suerte de exorcismo, de sacar fuera los fantasmas que se crean en las relaciones de pareja. «Fue una forma de desahogo, como cuando llamas a un amigo y le cuentas tus intimidades. De una forma un poco bestia, sin autocensuras. La mayor parte de las cosas que cuento me han pasado a mí o me las han contado mis amigos, pero no me he basado en nada ajeno. He intentado reflejar la vida. Es lo más personal, lo más real que he hecho», asegura Marqués sobre su primera obra teatral, que ha triunfado en el teatro Lara de Madrid y que tendrá en Ibiza su primera oportunidad fuera de la capital.

«He disfrutado escribiendo -afirma de todas formas-, porque he sacado fuera muchos fantasmas. Son experiencias que he vivido, por suerte o por desgracia. Te das cuenta de que todas esas cosas con las que lo pasas tan mal, vistas desde fuera, con otra perspectiva, parecen ridículas. Que con las cosas que en un momento dado te han jodido la vida, la gente se descojona. Si algo tengo claro ahora es que para tener una relación sólida hay que aprender a discutir y eso es algo muy complicado», dice mientras se toma un café en un bar de Can Bonet, su barrio, en su última visita a la isla antes del estreno en Can Ventosa.

Para hablar sin tapujos sobre el sexo, los celos, la intimidad o la impuntualidad ha tirado de su ´seña de identidad´, la espontaneidad en los diálogos, y dice que eso ha calado en el público: «Ves que mucha gente se siente reflejada y las parejas se dan codazos cuando la ven, y eso es algo que te llena». Lo sabe bien, porque desde que se estrenó, a principios de octubre, ha asistido a todas las representaciones y en todas ellas ha ido viendo detalles que corregir, que pulir.

«Desde la primera función, que era casi un ensayo general, porque no habíamos podido disponer de la sala hasta ese momento, fue muy bien. La gente llenó la sala, se rio y disfrutó y salimos alucinados. Pero he sufrido en todas las sesiones -admite-, porque siempre ves detalles que se pueden mejorar y esto no es como el cine. No puedes parar y pedir que se repita. Es un plano secuencia de 90 minutos y no puedes corregir hasta el final».

Para hacerla creíble y espontánea ha necesitado mucho trabajo y la implicación de un reparto de lujo: Gorka Otxoa, Eva Ugarte, Pablo Puyol y Mariam Hernández: «Tres de los cuatro ya tenían experiencia en teatro y han aportado mucho. Hemos ido descubriendo el texto juntos, añadiendo y puliendo las cosas que hemos considerado necesarias», dice Marqués.

De hecho, ´Espacio´ nació en el Festival de Cine de Tarazona, cuando Marqués conoció a Otxoa y Pujol. «Nos sentamos a tomar algo y conectamos enseguida. Empezamos a hablar de las relaciones de pareja y dijimos que había que hacer algo sobre eso. Ese fue el germen del que salió el guión», explica el director.

Un guión de cine, porque la idea era hacer una película: «Estaba escrita como película para ocho parejas, 16 actores. Pero se cruzó el rodaje de ´Dioses y perros´ y el proyecto se paró. Entonces la productora Niños Malos me propuso convertirlo en teatro. Con tantos actores era complicado para un escenario, teníamos un equipo pequeño y solo podíamos hacer una escenografía mínima, así que hubo que adaptarlo, pero los bajos presupuestos nunca me han dado miedo. La reconvertí a cuatro actores y cambié muchas cosas, porque el teatro tiene un código diferente, más sutil. Pero fue sencillo y ha funcionado muy bien».

Marqués está encantado con la experiencia, de la que dice que ha aprendido mucho, y ya piensa en nuevos proyectos teatrales. De momento seguirá con ´Espacio´ en el Teatro Lara, todos los jueves a las 22 horas, hasta enero y luego tiene ofertas para llevarla a una sala mayor y para iniciar una gira, aunque no quiere adelantar acontecimientos.

Sobre el futuro, Marqués ya está trabajando en nuevos textos como ´El Club del Paro´, que era un proyecto para serie de televisión que no cuajó, o las adaptaciones de sus películas ´Aislados´ y ´Desechos´ a las tablas. ´Desechos´ es la más avanzada y, de hecho, ya está negociando con los actores. De todas formas, no renuncia a la idea de convertir algún día ´Espacio´ en película: «El teatro es efímero, desaparece, y yo mantengo ese gusanillo del director de cine de fijar las cosas, así que espero hacer algún día la película».