Investigadora, profesora y documentalista, con 15 años de experiencia en producción y contenidos de documentales para televisión y cine en Brasil, Adriana Cursino conoció Ibiza durante unas vacaciones de verano. Un buen día, ya enamorada de la isla, decidió que tenía que contar las historias de su gente e ir más allá de la imagen de paraíso circense del ocio nocturno que se vende al exterior, un espectáculo de cartón piedra que a Cursino no le interesa «nada».

El resultado es ´Viaje a Yebisah´ un documental de 72 minutos que cuenta la historia de la isla a través de testimonios de personas conocidas y anónimas entrelazados con numerosas imágenes de archivo. Se presenta este martes a las 20 horas en el Club Diario de Ibiza con las intervenciones del director de cine Antonio Isasi-Isasmendi y del crítico de cine Carles Fabregat.

«El año pasado vine a Ibiza de vacaciones después de terminar mi tesis doctoral, que hice entre Madrid y Río [de Janeiro], de donde soy. Llegué a la isla con la perspectiva de descansar pero poco después me puse a investigar la historia de la isla», relata Cursino, una trabajadora incansable que se zambulló de lleno en el Arxiu d´Imatge i So e Històric con la idea inicial de investigar las figuras de artistas y escritores que visitaron Ibiza en el período de entreguerras «como Walter Benjamin», un autor que le encanta.

Empezó a recopilar imágenes de archivo, un área en la que está especializada, y, a la vez, comenzó a interesarse por los testimonios de personas mayores de la isla que le contaban historias de sus vidas. En base a todo ese material escribió un guion y comenzó a plantearse la posibilidad de rodar un documental. «Me animó la pasión con la que estos señores mayores me contaban las historias de su vida, de sus familias, de sus experiencias», explica la directora, que pensó que esos relatos «merecían un tratamiento profesional serio porque suponen un registro oral muy potente».

Propuso la idea a una productora inglesa, Film Plus, que cuenta con una filial en Ibiza, «y se prestaron a dar todos los equipos necesarios para el rodaje sin cobrar absolutamente nada», asegura Cursino, muy agradecida por ello. Para formar el equipo humano recurrió a sus amigos y conocidos de Madrid. «Vinieron dos fotógrafos y un técnico de sonido y además conté con un productor en la isla. Todos trabajamos sin presupuesto durante una semana y con los equipos prestados», subraya la directora, que destaca el trabajo de Rubén Cogolludo, el productor ejecutivo del documental, «que fue clave para todo el proceso».

La directora también agradece el apoyo del Isasi Isasmendi y de Carles Fabregat y, «por supuesto, de todas las personas que han aportado sus testimonios al documental por confiar en mí, recibirme y tener la generosidad de abrir su memoria y su intimidad», remarca.

Relatos del movimiento hippy, de los mitos y leyendas de la isla, de la evolución de empresas como Las Dalias o Salinera Española, la historia de la comunidad gitana en la isla o cómo afectó la dictadura franquista se va tejiendo a través de los testimonios del cantante Paco Romero, el director Antonio Isasi Isasmendi, la profesora de yoga Anurag, el político José Luis Rodríguez, los empresarios de Las Dalias Juan Marí Juan y su hijo Juan Marí, la pintora brasileña Jussara y su marido, el galerista Gastao Heberle, el chamán Miguel Cabezas, el escritor Juan Marí Tur y Fabregat.

Actualmente Adriana Cursino, que vive en Madrid, está enfrascada en un trabajo postdoctoral de investigación sobre el cine de apropiación, vinculado a la Universidad Carlos III de la capital y financiado por Capes Foundation del Ministerio de Educación de Brasil.

Festivales | «Este documental es un regalo para la isla»

Adriana Cursino ya ha enviado el documental a varios festivales especializados, pero ha querido que el estreno fuese en Ibiza. «Este documental es un regalo para la isla», asegura la directora, que avanza que va a programar varias proyecciones en Madrid, «pero sin cobrar absolutamente nada, porque es un documental independiente que no tiene presupuesto y, además, parte del material que contienen no permite hacer un uso comercial de él. Está pensando más para universidades, estudios, cineclubes...», añade la directora de la cinta.

A Cursino le interesan los documentales de carácter ensayístico que le permiten «un espacio de creación más amplio, diferente de los documentales convencionales, más clásicos». Así, ´Viaje a Yabisah´ es un documental-ensayo que combina testimonio de personajes e imágenes de archivo y para el que ha contado también con música ibicenca como las Caramelles.