Un futuro cercano. Ibiza ha superado el apocalipsis zombi que ha asolado el planeta, la sociedad y la economía están devastadas y el medio ambiente destruido tras los vertidos de las plataformas petrolíferas. Todo se ha perdido.

Este es el punto de partida de ´IB-Z´, el estreno en el cine de José Ignacio Ricarte después de 15 años dedicado al teatro aficionado y que se presenta este jueves, a partir de las 20 horas, en el cine Serra de Vila.

Tras la crisis, los supervivientes explican en primera persona cómo han luchado, cómo se han organizado, cómo les ha afectado esta situación impactante y también el deseo y la necesidad de construir una sociedad nueva, en este documental de ficción rodado por Ricarte desde el pasado mes de noviembre y que ha terminado de montar con el tiempo justo.

«El tema zombi siempre me ha gustado y no por la actual moda. Tengo una biblioteca sobre zombis, cómics, películas, series... Así que cuando me planteé hacer una película no lo dudé. Me interesa más el asunto de la organización social que el de la sangre. Soy muy friki con este tema, a veces entro en un edificio y pienso cómo podría defenderse de un ataque zombi... De todas formas hay muy pocos zombis en la película porque no había mucho presupuesto y se basa en las entrevistas a los supuestos supervivientes», explica el médico zaragozano e ibicenco de adopción.

El presupuesto ha sido exactamente 150 euros en maquillaje. El resto es el trabajo de Ricarte, como guionista, cámara, director y montador, y de los alrededor de cien actores que han colaborado, además de los cables que le han echado algunos cineastas de la isla con bagaje en el cine de terror, como Adrián Cardona y Héctor Escandell.

«Estoy muy agradecido a todos los que han participado, a los grupos de teatro de los institutos Algarb y sa Colomina y del colegio Can Cantó y a todos los actores. Algunos de ellos aparecen por primera vez en una película. He tirado también del mundo sanitario. Los médicos son médicos de verdad, compañeros, y la enfermera es una enfermera a la que pedí que me contara su peor noche en Urgencias y le di la vuelta», cuenta Ricarte, que al final se ha encontrado el problema de ponerlos en el cartel: «Es una película coral y tanto los actores más conocidos que aparecen como los debutantes hacen papeles similares, así que no sé si elegirlos por sorteo o no poner a ninguno».

Banda sonora

También ha contado con ayudas de amigos para la banda sonora. El músico Lorenzo Cortés Concha ha compuesto varias piezas originales para la película y diferentes grupos y artistas, como Tales of Gloom, Mürfila, Myuu, Ferran Nogués o Vate, han cedido canciones.

El nuevo realizador asegura que la película es «muy metafórica» y tiene «muchas lecturas». Así, se puede ver una crítica a un tipo de turismo zombi descerebrado que solo consume y no se preocupa por nada, y, sobre todo, la necesidad de proteger el medio ambiente. «Tiene un mensaje: no valoramos las cosas hasta que no las perdemos. Tenemos que planteárnoslo ahora y proteger la naturaleza, las playas...», afirma Ricarte, que, para las imágenes del desolado mundo posapocalíptico no ha tenido que recurrir a efectos digitales: «Si alguien vio a un loco grabando la ciudad abandonada el 1 de enero a las 8 de la mañana, era yo», dice entre risas.