Diana Masiliauskas no es una desconocida en el mundo del arte de Formentera ya que su larga trayectoria la ha consagrado como una de las creadoras más constantes. La pintora, originaria de Lituania aunque su nacionalidad es alemana, descubrió Formentera en 1973 y desde entonces ha pasado largos periodos de residencia. Cuatro años más tarde inició su formación artística, primero como alumna del pintor Fred Bandekow y más tarde, entre 1982 1985, en la Academia de Arte de San Francisco en California.

De regreso a Formentera su primera exposición en las Pitiusas fue en Ibiza, en 1987, concretamente en la desaparecida sala de Cultura de Sa Nostra. A partir de ese momento ha ido exponiendo de forma regular en Formentera y su obra se ha paseado por todos los espacios expositivos de los años ochenta. Recientemente, ha expuesto en la sala de La Caixa y en la extinta galería Bullit de blau de Ibiza, como participante en una muestra colectiva de pintores de Formentera.

Ahora, el hotel Es Marès ha colgado de sus paredes sus obras más recientes que intercala con piezas de su colección. Fiel a su estilo, Masiliauskas pone a la figura humana, especialmente femenina, en el centro de su obra y a partir de ahí combina colores que marcan la geometría de sus lienzos, que pinta con técnica mixta.