Más de cien músicos y cincuenta voluntarios participarán este domingo, a partir de las once de la mañana, en el Festival Antipetrolífero InformARTE que tendrá lugar en Las Dalias de Sant Carles y cuyo objetivo es «atraer a una importante cantidad de ibicencos y residentes que, a su vez, puedan informarse, reflexionar y tomar conciencia sobre las terribles consecuencias ambientales y socieconómicas que supondrá, para las islas, el proyecto petrolífero de Cairn Energy». Así lo anunciaron ayer los organizadores de este evento, la plataforma Ibiza Petrolífera y Las Dalias, empresa que cederá un porcentaje de su recaudación a la lucha contra el proyecto de prospecciones.

La portavoz de Ibiza Anti Petrolífera, Sandra Benbeniste, y el también miembro de esta organización Octavio Pertot, además del representante de Las Dalias Txema Pallero, explicaron que se tratará de una jornada «familiar», pues la mañana estará fundamentalmente dedicada a los más pequeños, con juegos y atracciones infantiles. A medio día se servirá una gran paella, así como carne a la barbacoa y otras viandas todas ellas a precios populares. La tarde se dedicará a actividades literarias, poéticas y de danza, mientras que por la noche actuarán los grupos musicales, fundamentalmente de rock, que apoyan esta causa. La música durará hasta la madrugada.

Benbeniste recalcó que «las prospecciones se pueden parar, por mucho que diga el ministro Soria». La dirigente de la plataforma añadió que durante toda la jornada se explicará el proyecto y se informará de los perjuicios que ocasionarán las prospecciones, especialmente a la fauna submarina, pero también a la economía insular.

En la actualidad, la empresa está elaborando la Evaluación de Impacto Ambiental. Previsiblemente, como presume la plataforma Ibiza Antipetrolífera, esta será favorable al proyecto, pero «hay que esperar que el Gobierno contemple la opción cero», es decir, el informe negativo, que supondría la cancelación del proyecto.

Iniciativas como la que Cairn Energy quiere llevar a cabo en Ibiza «se han parado en otros lugares de España y del mundo», sin necesidad de indemnizaciones, señalan los ecologistas.